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Novato, que lanza a 104 mph, seria cerrador de Detroit

1f027375be0d8a32c34156098b443180_620x412Bruce Rondón conversaba con los periodistas en la cueva con la ayuda de un intérprete cuando le preguntaron qué tan rápida era su recta.

El cotizado prospecto de los Tigres de Detroit afirmó que ha llegado a las 104 millas por hora.

«Quiero ver eso», dijo entonces su compañero el dominicano Joaquín Benoit.

Escepticismo, entusiasmo y, sobre todo, curiosidad.

Esas son las sensaciones que los Tigres guardan con respecto a Rondón en estos momentos.

El derecho venezolano, que intimida con su corpulento físico, podría ser el cerrador del equipo en el inicio de la nueva temporada.

Pero aún no ha hecho un solo lanzamiento en Grandes Ligas, y los campeones vigentes de la Liga Americana quieren asignarle un papel preponderante dentro de su bullpen.

«De los muchos jugadores en nuestro equipo, que son titulares, ya uno sabe lo que pueden hacer. La única interrogante que tengo hasta ahora es sobre Rondón», expresó por su lado el relevista dominicano Octavio Dotel. «Tendrá que relajarse cada vez que vaya a lanzar en la novena. Eso es lo que voy a inculcarle todos los días, todo el tiempo».

Detroit dejó ir a José Valverde tras la pasada temporada. En vez de adquirir a un taponero experimentado, los Tigres dejaron vacante el puesto.

El motivo de la decisión obedeció a Rondón, quien cumplió 22 años en diciembre y cumple su sexta temporada con la organización.

Rondón fue el mejor lanzador de los Tigres en las menores en 2012, cuando se apuntó 29 salvamentos y un promedio de 1.53 con las sucursales de Lakeland en la Clase A, con Erie en la Doble A y con Toledo en la Triple A.

Números impresionantes, pero Rondón trabajó solamente ocho entradas con Tolero. En sus 196 entradas en las menores, tuvo 213 ponches. Permitió 111 bases por bolas, pero le batearon apenas un .189 de promedio.

El piloto Jim Leyland no desea que los avances de Rondón sean un asunto cotidiano en la pretemporada. Asegura que tendrán paciencia con el venezolano para determinar cuán listo está para asumir un papel de cerrador en las mayores.

«Ha sido un lanzador de sacar ponches en las ligas menores. Ahora estamos en las mayores», señaló Leyland. «No estoy dejando esto de lado, pero no voy a estar en esto todos los días. Contamos con un joven con un brazo magnífico; ¿Cómo se va a desempeñar en el juego? No puedo responder eso, pero eso es lo que tenemos».

Si Rondón no se gana el puesto de cerrador, Detroit tiene otras opciones para la novena entrada. Benoit pasó apuros el año pasado para evitar jonrone, pero su efectividad fue de 2.95 en 2011 con los Tigres. Al Alburquerque tiene un promedio de 1.59 en 49 apariciones en las mayores. Dotel acumula 109 salvados en su carrera, y Leyland recurrió a Phil Coke en situaciones de alto riesgo el año pasado después de que Valverde empezara a flaquear.

Pero por ahora, Rondón está en el puesto. Claro que tiene la talla y la mirada de un relevista intimidante.

Por lo pronto, surge la deuda sobre qué consejos ha recibido ya.

«De todo tipo, esto es béisbol», dijo Rondón.

Los Tigres, por supuesto, esperan que haya mucho de verdad en eso.

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