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Floyd Mayweather vs Robert Guerrero, pelea estelar Sábado 4 de Mayo de 2013

303018_581266561893100_288862769_nMay Day (nombre propio): El nombre recientemente otorgado a un día festivo, no oficial, en el boxeo, llamado así porque Floyd Mayweather está a punto de protagonizar un evento boxístico de Pay Per View el primer sábado de mayo por cuarta ocasión en siete años.

Mayday (sustantivo): La señal internacional radial de peligro, del francés m’aider, o «ayúdenme».

No sabremos a ciencia cierta hasta que los números comprados por PPV lleguen luego del combate del 4 de mayo de Mayweather contra Robert Guerrero, pero se empieza a sentir que ambas definiciones pueden aplicarse a esta pelea. Las peleas anteriores de Mayweather en el fin de semana del Cinco de Mayo contra Oscar De La Hoya, Shane Mosley y Miguel Cotto atrajeron a 2.4 millones, 1.4 millones y 1.5 millones de compras respectivamente. Dan Rafael de ESPN.com, estimó la semana pasada que Showtime, que está entrando en la primera pelea de un posible acuerdo de seis combates con Mayweather, necesita un poco más de un millón de compras para salir a la par en el combate contra Guerrero. Showtime no revelará cuánto necesita realmente para salir empatados; el vicepresidente ejecutivo de Showtime Sports, Stephen Espinoza, me dijo que considerando los factores secundarios asociados con tener a Mayweather bajo el estandarte de la cadena, «el acuerdo vale cada centavo» sin importar cuántas ventas el combate genere. Independientemente, hay un sentimiento creciente entre los infiltrados en el mundo del boxeo que 1 millón de compras no es un hecho seguro. Y esa preocupación es altamente atribuible al hecho de que, antes de que Mayweather y Guerrero puedan empezar a darse puñetazos, el callejón sin salida que es a la programación del documental de «Money» Mayweather le están pateando el trasero.

Mayweather no inventó el documental del boxeo/ los programas de ‘reality’/ la programación para el bombo publicitario, pero se ha convertido en su portavoz. De La Hoya y él protagonizaron en la primera iteración del programa de HBO 24/7, y mientras que Oscar era la figura más atractiva originalmente, Mayweather emergió como la estrella del programa, la personalidad provocadora ideal para la era del ‘reality t.v.’. Terminó protagonizando cinco series más de 24/7, con regresos gradualmente decrecientes desde una perspectiva de entretenimiento. Una vez que se conoce todo lo que se necesita saber del boxeador del lado A, el programa es tan sólido como la personalidad del boxeador del lado B lo permita. Típicamente, esto se ha traducido en material suficiente para un episodio persuasivo para empujar una serie, seguido por los restantes tres episodios buscando a tientas tangenciales minucias (¡el mejor amigo de Cotto recibió un tratamiento del balón Gástrico! ¡El entrenador de Mosley sufrió un derrame!) mientras el tiempo es rellenado con metraje artístico en cámara lenta de los boxeadores golpeando los sacos. Cuando Mayweather hizo el salto de HBO a Showtime para la pelea contra Guerrero, también pasó de 24/7 a All Access, lo cual es esencialmente el mismo programa con Common como narrador en lugar de Liev Schrieber. Dos episodios han sido emitidos hasta el momento’ el tercero se emitía el sábado. Como lo informó Kevin Iole de Yahoo Sports, la audiencia para la emisión inicial del miércoles cayó de 105,000 espectadores a 64,000 para la segunda. El año pasado en 24/7, Mayweather y Cotto atrajeron a 493,000 por un solo episodio. Claro, factores externos como las introducciones, programas competitivos en el mismo horario siempre afectan los índices de audiencia. Espinoza destaca que con las repeticiones en Showtime y en cadenas hermanas, con el programa disponible por encargo o en el internet, la audiencia televisiva en el estreno no es remotamente importante como la audiencia total, y él dice que la suma total de audiencia del Episodio 1 ha excedido el 1.5 millones. La gente puede llegar a sus propias conclusiones acerca de cómo le va al programa. La conclusión que yo saco: el índice de audiencia está bajo — un poco al menos — y me sugiere que el público vidente se está cansando finalmente de los trucos de Mayweather. Y ese es el problema que Showtime ha agravado al contribuir al extremo con la sobresaturación de Mayweather. Showtime está admirablemente poniendo todos su poder promocional detrás de este combate, pero si mis sospechas acerca de la fatiga del público respecto a Mayweather son correctas, puede que sea muy tarde para la cadena. Es como cuando MTV lanzó dos productos derivados del programa Jersey Shore justo en el momento en que Los Estados Unidos se comenzó a cansar del producto, y los índices de audiencia para las nuevas series al igual que el del programa original, se hundieron al unísono. En adición a los cuatro episodios de All Access, vamos a tener una retrospección de una hora de la trayectoria del boxeador en Mayweather este sábado en CBS, además de un surtido de material original digitalizado. Las festividades arrancaron el 3 de abril con 30 Days in May, un film unilateral de una hora con Mayweather como productor ejecutivo que lo representa como una víctima luego de que se declaró culpable contra cargos por violencia doméstica. Algunas de las partes más memorables:

Los gráficos en la pantalla en el mismo comienzo dice que Mayweather «fue sentenciado a un término de tres meses por alegaciones de que agredió a su ex pareja, la madre de tres de sus cuatro hijos». No soy un experto en las cuestiones legales, pero estoy bastante seguro que meras «alegaciones» no hacen que alguien vaya a la cárcel.

Mayweather reflexiona que «Creo que soy una persona con los pies en la tierra» momentos después de mostrar su colección de Rolls-Royce. Para ser justos, no fue una demostración tan vergonzosa de enajenación como la escena de 24/7 del 2011 en la cual Mayweather llevó a las tropas sirviendo en Afganistán en un recorrido virtual por Skype por su mansión. Una escena en un club nocturno que revela desnudez en quizás una de las escenas más innecesarias de televisión por cable — una distinción no tan fácilmente ganada — en donde el trasero de una bailarina exótica se menea en cámara lenta. Se acerca mucho al pésimo territorio pornográfico del internet, pero nada es censurado. Bueno, excepto el rostro del ex mejor amigo de Mayweather, 50 cent. Eso sí lo cubren con un efecto borroso. Mayweather se hace la víctima declarando, «el sistema está construido para que yo haga un trato». Este es el mismo sistema que fue construido para que Mayweather reciba sentencia suspendidas cuando se declaró culpable ante cargos de violencia contra mujeres tanto en 2002 y 2004. Incluso Mike Tyson, mientras insistía que no violó a Desiree Washington, tiene la humildad de reconocer que no se comportó como ángel y que se merecía de cumplir tiempo en la cárcel por algo. Según los primeros dos episodios de All Access, es seguro decir que no le es rival en cualidades ofensivas a 30 Days in May, pero hay otros problemas. Cuando del argumento se trata, no mucho más ha sucedido hasta ahora que el arresto de Guerrero por el cargo de posesión de armas en Nueva York, que recibió protagonismo limitado. Mayweather está encerrado en una batalla feroz con el sencillo Guerrero para ver quién tiene menos cosas interesantes que contar. Lo más cercano a una persuasiva cita jugosa, aunque muy lejos de, vino cuando el «muy centrado» Mayweather dijo, «Si no tienes nada de dinero, pero tienen abundancia en el corazón, eres parte del Money Team». Desafortunadamente, teniendo abundancia en el corazón no cubren los gastos que vienen al ser un fanático del boxeo, y no está claro cuántos van a gastar $64.95 por una trasmisión de PPV en HD. Quizás mi pesimismo está fuera de lugar, y este combate igualará o superará la compra de 1.25 millones que la pelea de Mayweather contra Víctor Ortiz acumuló. Mayweather-Guerrero es una pelea rara de PPV en la cual la calidad del encuentro, se puede argumentar, excede su bombardeo publicitario, y la pelea secundaria es uno de los encuentros más fuertes que el boxeo ha juntado en años. Pero comparado con los eventos típicos de Mayweather, este parece estar escaso de alboroto con 10 días restantes. No ha ayudado el que Mayweather ha hecho poca prensa desde el comienzo, dejando a Guerrero cargando con la promoción — y que Guerrero más o menos dejó de hacer entrevistas luego de su arresto. Pero si en efecto estamos antes el combate de menos venta de Mayweather por PPV en cinco años, quizás podemos señalar con el dedo y echarle la culpa a algo sin relación alguna con la programación de Showtime y los esfuerzos de mercadeo, o la poco voluntad de los boxeadores de agitar la pelea en los medios. Quizás el mayor impedimento del interés del público se puede trazar al pasado diciembre, cuando Manny Pacquiao cayó plantado de cara ante Juan Manuel Márquez en el mismo cuadrilátero de MGM Grand donde Mayweather enfrentará a Guerrero. Mayweather vs. Pacquiao era la gran provocación del boxeo, la pelea más rica en la historia que nunca se llevó a cabo pero que sin embargo repetidamente llevó tanto a Mayweather como a Pacquiao pasada la barrera del millón para su compra. A pesar de lo enfermo que tenían a la fanaticada los medios principales redirigiendo la conversación hacia el combate Mayweather-Pacquiao, la existencia de esa conversación — la súper pelea teórica merodeando en el éter — vendió mucho en PPV para ambos boxeadores. Para el fanático convencional, la pregunta es que si la pelea Mayweather-Guerrero no es una puesta a punto para una Mayweather-Pacquiao, ¿por qué me va a importar la pelea Mayweather-Guerrero? No importa que ninguna de las peleas de Mayweather o Pacquiao en años recientes estuvieran armadas alrededor de dos de los mejores boxeadores en el mundo enfrentándose. Y no importa que Mayweather-Guerrero es un buen combate en sí mismo. Es una cuestión de perspectiva. Si el inminente evento «May Day» será un éxito en PPP, entonces todo el mundo envuelto tenía una esperanza mejor que Saúl «Canelo» Álvarez es un substituto razonable para Manny Pacquiao. Álvarez hizo su parte el fin de semana pasado con una victoria impresionante sobre Austin Trout, y el baile de «lo harán — no lo harán» entre Canelo y Mayweather ya comenzó. ¿Podrá la noción de un enfrentamiento en septiembre entre Mayweather y el galán mexicano de 22 años con pelo como la «canela» generar unas cientos de miles de compras en mayo? A Showtime ciertamente no le molestará si Canelo ayuda a vender el combate Mayweather-Guerrero, en caso de que ni Mayweather ni Guerrero hagan su parte.

3 comentarios

  1. gana money pero me gustaria que le den una golpiza.

  2. argentina aguante maravilla.

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